“QUERIDOS RECUERDOS”
A MI QUERIDO BARRIO DE CIUDADELA...NUNCA TE OLVIDÉ
A veces me tomo
uno de esos sueños,
que muy a menudo
yo suelo tener,
camino a la escuela
escribo mi historia,
y recuerdo a mi barrio
mi viejo...querer.
El cantar del jilguero
endulzando mi infancia,
y el croar de los sapos
allí en el zanjón,
mi mundo era ese
cabía en mis manos,
dejé en cada esquina
gotas...de emoción.
Mi barrio tenía
un sutil encanto,
brotado quién sabe
de que surtidor,
malvones muy rojos
también madreselvas,
me hablaban de cosas
regadas...de amor.
En él sepultaron
momentos sublimes,
la rueda del tiempo
macabra pasó,
borrando ilusiones
y deseos fervientes,
me espera un niño
que allí...se quedó.
Aprendí que la vida
es un largo camino,
de idas y vueltas
donde te golpeás,
no puede borrarse
un pedazo de tiempo,
que aunque nos duela
jamás...volverá.
Si fuese posible
llegar con mis ganas,
a quién desde arriba
me indica que hacer,
seguro le pido
aquella inocencia,
que hace ya tiempo
supe...yo tener.
Sería muy lindo
que Dios con su magia,
pudiera juntarnos
en torno al buen sol,
a todos los amigos
de mi barra querida,
y en la vieja canchita
gritar...algún gol.
Anduve a las corridas
todos estos años,
con tan poco tiempo
sin poder parar,
siento fuerte en mi alma
las voces del pasado,
mi barrio añorado
yo estoy...donde estás.
Boris Gold (simplemente...un poeta)