Tu sueño me despierta,
me despierta tu respiro.
Vigilo tu calma, tus latidos,
y te observo tranquilo.
Cuento las olas de tu pecho,
mido la extensión de tus orillas.
El arco firme de tus caderas,
y la rada estrecha de tus piernas.
Dibujando toda tu geografía,
con la mente que siente sin tocarte.
arrúllandote en silencio inagotable
mientras el deseo es fuego que arde.