El día que yo me enteré
que estaba preñada,
fuy muy feliz,porque fuistes
una hija deseada.
La luna me dijo:
que te esperara
nueve meses,
mientras tanto,
tu padre te hizo
una cuna.
Le pusimos un colchón
de amores,
y una almohada de plumas.
Te compuse una nana
que todos los días
te cantaba.
Con las olas de la mar,
te hice un sonajero
de espuma,
para que aprendieras
a jugar.
En lo alto de la cuna,
puse una campanita,
para que cuando
te despertaras,
la campanita sonara,
y un ángel,ganara sus alas.