La estrella refulgente cual lucero,
el cielo que nos brinda luna clara;
unidos me parecen bella tiara
forjada por Hefesto el alfarero.
La dama que nos dio su amor sincero,
y llena de pasión calor brindara;
se marcha con el beso que calmara
el ansia que causó mi desespero.
El mundo lo llenamos de belleza
con sueños que veneran hermosura
y ofrecen a la vida tierno beso.
Se buscan el honor y la grandeza
llevando corazón como armadura
que lleva de templanza el nombre impreso.
Autor: Aníbal Rodríguez.