Barro soy,
agua y tierra,
algo de piedras.
Por eso soy tan feliz en los charcos,
y tumbado al sol de los geranios,
seco mis heridas de miles de años.
El barro,
origen y final de todo.
El charco,
causa y desenlace de todo.
Y vuelta a empezar,
eterna primicia de la vida.
Asomado al extremo de mi fortuna
para escuchar la verdad
que es la primera.