Hoy podría ser un buen día.
Podría serlo, si el cielo de violeta se pintara.
Si la tristeza del abandono, de tus ojos se borrara,
Y tus labios, aquel nombre tan perfecto, nunca más pronunciaran.
Podría serlo,
si no durmieras con la soledad todas las noches,
si no hubieras dañado a quien nunca quisiste lastimar,
Y sus suaves manos, con caricias, te pudieran consolar.
Un buen día, sin dudas, sería,
Si de tu mente, se borraran los recuerdos,
Si tus besos fueran libres como el amor, supone, deben ser.
O desde el alma, alguien más, un suspiro te supiera generar.
Porque bastaría un beso,
Un abrazo o una sonrisa,
Para sentir que nuestro día,
un gran día pudiera ser.
No cabe duda, mujer,
que si dueño no tuvieran, tus nocturnas letanías, que de arrepentimiento suspiras,
un gran día, cualquiera pudiera ser.
Pero un gran día, no puede,
ni podrá ser;
Porque sabes que me amas y aunque tú me ames,
Yo no te puedo corresponder.
Porque un muerto no ama,
ni siente,
ni sabe querer.
Hoy habría Sido un gran día
Si no me hubieras conocido,
Si no hubieras maldecido
tu existencia con la mía.