TU CORAZÓN
Tu corazón se hizo piedra;
piedra dura;
granito sin alma.
Ya no late, ya no siente
por el otro.
Se encerró en su concha existencial.
Almuerza indiferencia,
bebe el vaso del egoísmo.
Solo vive por vivir
¡Es igual vivir que morir!
Como un zombi errante,
viajas por la vida,
tu mirada solo fija
en el vil metal.
Otro hombre reza en algún lugar:
Señor: que su piedra se haga carne,
que sus brazos abracen al desvalido,
que sus ojos miren el dolor del hermano;
que se empapen de humanidad.
¿Por qué su corazón en círculos busca felicidad?
Quizás en el amor al hermano halle su saciedad.
Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos Reservados