PERDÒN
Perdone señora:
Aquel beso tan ansiado,
que daba en su frente;
Sorbo de un beso deseado
que desdeño ese sorbo,
bebiendo en su torrente.
Sí; De ese apetecido torrente,
de sus labios de fuego
y que ansioso y osado,
besé fervientemente.
Le pido perdón humildemente,
por este amor que dentro llevo
y se metió a mi alma sutilmente.
Perdóneme por amarla.
Nuevamente, le ruego.
No quise profanar su cariño de amigo,
sólo amarla con este amor quizá imposible
y la llevo en el alma en verdad se lo digo,
aunque su alma a mi amor sea insensible.
Más no por insensible a este amor,
su corazón a amar sea inmune;
Que duro un amor que se consume,
cuál rescoldo que pierde su calor.
No culpa usted señora,
por ser sutil y bella,
como no culpa la estrella,
si al cielo enamora.
Ni tampoco yo he pecado,
por amarla ciegamente,
cuantos viendo no han amado.
Y sí; Ultrajado vilmente.
Autor: Víctor A. Arana.
(VÍCTOR SANTA ROSA)
Septiembre 8 del 2019.