Lu-na

Juro que lo intento

Juro que lo intento, que trato de no verme rodeada de mis pensamientos mas oscuros cuando te ausentas, intento mirarte de frente después de largos días sin verte y continuar como si nunca hubiera imaginado tu vida lejos de mi. Te puedo ver cruzando la puerta y sonriendo como lo haces siempre, con una sonrisa coqueta, una mirada tierna y unos brazos que se extienden para abrazar tu felicidad, la familia que tanto amas, el hogar al que siempre vuelves.

Juro que lo intento, que no estoy diciendo que el papel de amante me queda chico y quiero más, no es eso, amo los minutos que puedes entregarme y los restos de las cenas que compartes conmigo en mi imaginación. Es solo que hay días que no puedo verme hermosa, que no puedo ser atenta, y ser la muñeca de porcelana por la que pagas para jugar en la cama, a veces me cuesta tanto entender mi lugar que prefiero ignorarte y volverme distante hasta que la realidad desaparezca igual que tú en los días que no me pertenecen. 

Juro que lo intento, quiero verme dulce, una niña hermosa que atiende a prisa el móvil cuando se le requiere, pero si he de confesar, no me siento como una niña ni siento dulzura en mi proceder y aunque quisiera culparte de lo que me hiciste, en lo que me convertiste, yo solo puedo intentar, e intentar, e intentar, hasta que me salga mi papel, hasta que me salga este papel que acepte descuidadamente. 

Aquí sigo, intentando, usando la ropa que tu gusta, el perfume que compraste para mí, la lencería que deseas ver sobre mi cuerpo, la sonrisa que esperas sea un escape, sin preguntas, sin requerimientos, sin algo más que unas horas de placer. Soy quien enciende tu sexo, quien alimenta la juventud de tu espíritu, un traste desechable que no decides desechar pero tampoco pertenece a un lugar fuera de tu cama. 

Juro que lo intento, que aquí estoy, intentando no romperme.