He pensado en escribirte una carta,
Donde plasme todos mis pensamientos sobre ti.
Con palabras correctas,
De tal manera que cuando las leas,
Llenen todo tu cuerpo de un escalofrió.
Escalofrío;
Por la impresión de haber encontrado entre páginas,
Un sentimiento de plenitud.
He escrito tantas hojas que he perdido la cuenta;
Tantas frases borradas que no logro expresar,
Momentos soñadores a tu lado.
Hojas blancas
Noches cubiertas de pensamientos;
Imaginación de una vida de abundante felicidad.
Horas que pasan y mis ojos suelen vencer,
Bendición de despertar hasta encontrar,
Las palabras correctas.
Las hojas se han terminado,
Lápices ya sin punta,
La luz de mis ojos se ha pagado,
Con sueños no escritos.
Me presento ante ti,
Ofreciéndote con mis manos,
Lo que no pude plasmar entre hojas.
Con mirada baja,
A disgusto por no darte,
Lo que mereces.
Mujer perfecta;
Tan solo te ofrezco mi corazón.
Donde siempre vivirás.