Solo estoy seguro con el dinero. Con él o te curas o te mueres. Haces lo que tu quieres. Y eres de tu jardín jardinero. No quiero dinero para una lápida. Solo para comer, leer y beber. De nada sirve tener o no tener. Y la muerte que sea tranquila y rápida. Dijo el poeta juventud divino tesoro. Tuvo suerte porque conoció el amor. Lo triste es pasar la vida solo con dolor. Y andar sin consuelo por el foro. Volverán las cigüeñas y los cuervos. Volverán a las torres y tejados. Volverán los poetas desesperados. Volverán los señores y sus siervos