Julio Noel

Cuando se evaporaban las perlas del rocío

Cuando se evaporaban las perlas del rocío

esta agradable mañana de primavera,

me acerqué muy quedo de tu casa a la vera

para trocar un beso tuyo por otro mío.

 

Pero ¿cuál no habrá sido mi aciago desvarío

al descubrir tu hermosa mansión cerrada entera

y que en todo su derredor ni un alma siquiera

se haya dignado sacarme de este gran vacío?

 

Desde ese momento peno por tu cuerpo ausente

y añoro los dulces besos de tu linda boca

que me guiaban al éxtasis de un mundo mejor.

 

Ya no anhelo nada del atroz mundo presente,

pues en esta aciaga vida toda dicha es poca

para quien se ha quedado sin su verdadero amor.

 

Canciones de amor.