Eres linda,
y no porque yo te lo diga,
sino porque tú te lo dices.
Eres linda,
y no porque otro te lo diga,
sino porque cuando te miras en el espejo,
te miras y sonríes.
Eres linda,
y no porque todos te lo digan,
sino porque sabes quererte.
Eres linda,
y no porque el mundo te lo diga,
sino porque cuando quiere callarte,
tú te sientas a escuchar,
y hablas, y no callas.
Eres linda,
y no porque yo te lo diga,
sino porque sabes que te quiero,
y lo linda que eres por fuera,
lo eres por adentro.
Eres linda,
y no porque yo o el mundo te lo diga,
sino porque tú sabes
que eres preciosa
desde el cuerpo hasta el alma.
Libro: Poemario
Edisson A. Cajilima Márquez