A pesar de habernos reinventado
día a día
en el intento por zafarnos
de la monotonía;
Pese a que hayamos completado
ya la colección
de las caricias a bocajarro
en el álbum del amor;
aunque miremos hacia atrás
y en el camino recorrido
no consigamos ver más
que un reguero de idilio;
pese a llevar acumulado
a nuestras espaldas
un cargamento de ratos
plagados de hadas...
Nuestro día más feliz
aún está por venir.