I
¡Amado y eterno señor¡
Quiero estar siempre en tu presencia
Anhelando la esencia
Que me da tu unción
Es el placer de estar contigo
Nutriéndome del elixir
Que me da tu excelsa sapiencia
Y por esta razón
Te pido que me des el gozo
De estar siempre en tu regazo
Porque cuando estoy en tus brazos
Todo en mi mundo es posible
Porque el Dios de lo imposible
Es quien dirige mi camino
Ahora, mañana y por siempre
II
¡Amado Jesucristo¡
Delante de ti hoy me inclino
Buscando que avives el fuego
Ese don espiritual
La herramienta esencial
Que Dios por medio de ti me entrego
Y me dio el albedrío
De ser una nueva criatura
Al limpiar mi vestidura
Con su sangre preciosa
Haciendo de mí una vasija de honra
Que le sirve con el corazón
Al poderoso en batalla
Al que adiestra mis manos
Para en su nombre vencer
III
¡Servirte a ti mi señor¡
Es el privilegio más hermoso
Y estoy muy agradecida
Porque le has dado a mi vida
Mil razones para adorarte
Y en tu nombre avanzare
Sin temerle a la adversidad
Porque tú me has dado a mi vida
Un espíritu de valentía
Para llegar a mí destino
Porque tu poder es quien me alimenta
Y me da día a día la sapiencia
Para alcanzar la victoria
Porque el Ángel de Jehová
Delante de mí siempre va
¡Abriendo ventanas y puertas¡
ENEIDA JOSEFINA BRAVO REALZA
POETISA DE JESUCRISTO
EL BAÚL-VENEZUELA
27/09/2.019
01:45 a.m