PARA MI QUERIDA MADRE
(María Manuela Aguilar)
Soy el vellón que en tu vientre tejiste
soy el fruto de tu intento primero
el brote primogénito de tu primavera
soy el viajero que a este mundo trajiste.
Madre, todo cuanto soy te lo debo a tí,
la ternura, el cariño, tu caricia primera,
la divina luz de tu mirada placentera
que al abrir mis ojos por vez primera ví.
Madre, que la luz que iluminó mi aurora,
sea la misma que ilumine mi terrenal carrera
esa luz que emana de tus ojos madre mía.
No distraigas tus ojos en mi postrer hora
dame la luz de tu mirada placentera
hoy que transito por escarpada vía.
Madre, por seguirte, de mi pecho el alma vuela
para estrecharte en mis brazos, y dormirme en ellos
como cuando yo era un niño, MAMÁ Manuela.
Mario Cabrera Aguilar. (mariocaba) mayo 10-2018