Cuando llames (si llamas)
no sabré si decirte
que eres una tormenta
muy nueva para mí
o si eres brisa
para enjugar mis sueños.
Todo dependerá del tono de tu voz
de sus matices.
Mientras esto suceda (si sucede)
cierro los ojos y miro
cómo mi alma navega
mas allá de las nubes
con hilo tenso
lejos del olor de la tierra
y desde el color azul
siento cómo se quiebran
las formas de tu cuerpo
que exhala en esta suave paz
mi aliento.