Cuando los luceros parpadean sus luces en el universo
mis pensamientos fluyen tan suave como la piel de seda,
que cubren tus querencias frágiles sin mezquindad indistinta
con el amor directo a la vida en medio de rosas vivas...
Despierto entre los amaneceres fríos en medios de los minutos
tan intrépidos y rápidos que arropan mi calma,
la cual se extiende entre aquel positivismo del orden
para solo dejar respuestas largas y tristes...
La tristeza se me va y viene muy amarrada de la verdad
la cual exhala los pasos dirigidos para la tranquilidad,
muy cubierta de observaciones participativa en lo ideal
ante la crueldad de la nada tan chispeante como el torbellino...
Vueltas van y vienen en medio de querencias tan lindas
como los besos largos y tiernos arropados entre ambos,
con la finalidad infinita del amor por siempre ante el tiempo
para llevarme a tocar tu cabellera de mujer bella...
Los versos me calman la ansiedad y la tristeza
para hacerla loable en medio de aquellas melodías románticas,
tan parecidas a tus miradas inquietante y abrumadoras
eternas en donde nos lleva hacia aquel paraíso del amor...
RIVAS JOSE
29-09-2019
Barinas-Venezuela