Como un ladrón nocturno así llegaste,
como un susurro del viento acariciaste mi alma, invadiste mis noches de fantasías y deseos.
Devolviste la alegría a un corazón agonizante; mis noches de tormenta se hicieron amanecer de arcoiris.
Mis sábanas se impregnaron de tu aroma y mi cuerpo se convirtió en volcán en erupción.
¡Llegaste tú, para quedarte y convertir mis mares en eternas sonrisas.!
Contigo aprendí el amor ése que jamás se olvida.
Un amor que hace soñar cada segundo, ése que promete ser fiel y eterno.
Y llegaste cuando menos te esperaba, mis cielos de tormenta hoy son el arcoiris de la vida.
Y llegaste cuando mi amor se desborda y hoy te amo, como jamás amé.
¡Llegaste a escribir en mi página blanca una historia de amor jamás escrita!
Con la convicción de amarte hoy prometo limpiar cada lágrima, porque mi amor por ti es incondicional.
¡Llegaste tú y te amé por siempre!