SI POR TUS BESOS MURIERA.
Son tus ojos dos abismos
de enigmática pureza…
irradiando la belleza
de los mares y los istmos.
Tu voz es como la de un pájaro
que canta en el almendro,
para desplegar su vuelo
al cerúleo firmamento.
Eres como un suspiro
arrastrado por el viento…
Es tu alma blanca y buena…
tan blanca, como la arena
del incandescente desierto.
¡Cómo quieres que no te quiera!
si eres mi dicha y mi tormento,
si por tus besos muriera…
se acabaría mi sufrimiento.
Felina