Ríe en tus adentros
diablo del alma
alienta a los muertos
en tu lecho de paz.
Recuerda a cada uno
los erizos de la mar.
Haz que sueñen
su veneno mortal.
Las navajas que
huelen el desespero
la luna que huye
de la soledad.
La realidad me acompaña
su sombra me hunde
y su mal me amenaza.
...Sola en su puerto,
sola en su mar…