HAY QUE VIVIRLO PARA SENTIRLO
Cada palabra se evaporó cual si fuera bruma,
cada sensación quedó en la nada,
es triste ver como se va lo que anhelaba.
Y se pierde...
el corazón deteriorado y débil,
pareciera vacío como el mismo precipicio.
Te pierdo... ya no te alcanzo.
La alegría que aún siente éste corazón pierde la fuerza,
ya no es ese viento que venía azotando con furia,
ya no es esa brisa tibia que antes esperaba ansiosa tu llegada.
Se que te pierdo...desgastado devasta
y las lágrimas brotan como manantial sin rumbo,
queriendo encontrar tu camino de vuelta.
Y te alejas...ya no regresas.
Sólo queda la esperanza de que en cada sueño...te encuentre,
y seas ese,
que sutilmente veía infinidad de veces...
Ese que sabía como hacer vibrar cada parte de mi,
cada noche...cada día.
Ese...que sabía como tratar a una mujer,
que sabía amar y al cuál le creí.
Sentir fantasma, ingenuidad del alma...
Ya no más amor, te fuiste,
silencio y vacío inmenso inundando por dentro...
Más queda tranquilo éste terco y guerrero corazón,
sabiendo que no siempre es victoria lo que se aprende al vivirlo.