Marcos Reyes Fuentes

Himno Nacional del Ecuador

Salve oh patria mil veces oh patria!

¡Gloria a ti! (2 veces)

Ya tu pecho, tu pecho rebosa,

gozo y paz ya tu pecho rebosa,

//y tu frente y tu frente radiosa

más que el sol contemplamos lucir.//

ESTROFAS

I Indignados tus hijos del yugo

que te impuso la ibérica audacia,

de la injusta y horrenda desgracia

que pesaba fatal sobre ti,

santa voz a los cielos alzaron,

voz de noble y sin par juramento,

de vengarte del monstruo sangriento,

de romper ese yugo servil.

II Los primeros los hijos del suelo

que, soberbio, el Pichincha decora,

te aclamaron por siempre señora,

y vertieron su sangre por ti.

Dios miró y aceptó el holocausto,

y esa sangre fue germen fecundo

de otros héroes que atónito el mundo

vio en tu torno a millares surgir.

III De estos héroes al brazo del hierro

nada tuvo invencible la tierra,

y del valle a la altísima sierra

se escuchaba el fragor de la lid.

Tras la lid, la victoria volaba,

libertad tras el triunfo venía,

y al león destrozado se oía

de impotencia y despecho rugir.

IV Cedió al fin la fiereza española,

y hoy, oh Patria, tu libre existencia

es la noble y magnífica herencia

que nos dio el heroísmo feliz.

De las manos paternas la hubimos,

nadie intente arrancárnosla ahora,

ni nuestra ira excitar vengadora

quiera, necio o audaz, contra sí.

 Nadie, oh Patria, lo intente. Las sombras

de tus héroes gloriosos nos miran,

y el valor y el orgullo que inspiran

son augurios de triunfos por ti.

Venga el hierro y el plomo fulmíneo,

que a la idea de guerra y venganza

se despierta la heroica pujanza

que hizo al fiero español sucumbir.

VI Y si nuevas cadenas prepara

la injusticia de bárbara suerte,

¡gran Pichincha! prevén tú la muerte

de la Patria y sus hijos al fin

Hunde al punto en tus hondas entrañas

cuanto existe en tu tierra, el tirano

huelle solo cenizas y en vano

busque rastro de ser junto a ti.