De tus ojos el verde fuego
mi corazón hirió de muerte,
nunca había tenido la suerte
de jugar del amor al juego.
Mi amada, por favor te ruego
que tu amor por mí sea tan fuerte,
que pueda por siempre tenerte
junto a mí con dulce sosiego.
No quiebres el endeble lazo
que amarra nuestros corazones
y fusiona en uno los dos.
Nunca jamás digas adiós
a nuestras dulces sensaciones
ni desdeñes un tierno abrazo.
Suspiros y sueños de amor