salgomanzano

Ese soy yo:

Un tiempo

que se ha ido,

un niño jugando en la plazuela,

adolescencia rota

amando amores prohibidos,

un corazón caliente

amando rubias trenzas,

un ardor joven

que iba conmigo,

rasgando

por vez primera

en la Noche Primera

-durmiendo con una rosa-

la tela intacta,

eyaculando

la lluvia blanca.

(Ese era yo.)

 

Un florido huerto

de esencias aromáticas,

un soñador de ilusiones ilusas,

un sobador de pezones erectos,

de zonas erógenas -entre sábanas-

amando la Belleza.

(Ese era yo)

 

 

Metido en una piel rugosa,

viviendo en caja de cerillas,

curvado, preparado para la Ida,

cansancio flácido

entre las piernas.

(Ese soy yo.)

 

Un andador de aceras

por donde anda la vida,

una alcoba fría que no florece rosas,

que no dice  "te quiero

con toda mi alma",

que no dice "quiero  `eso `

con ganas"

-la cama ya no es rica,

la cama es fría,

una ilusión tronchada-.

(Ese soy yo.)

 

Ilusión soñadora

que viaja todavía,

flor de un día de llama

subida,

un andador que pasea,

que vende su dolor,

no su alegría.

(Ese soy yo.)

 

Caballos en las venas

galopan

mi cuerpo,

voces en la garganta

diciendo "vámonos

al monte por romero".

(Ese era yo.)

 

Un río

que corre

al mar

de Azul Eternidad,

que vende su alma

(Ese soy yo.)

 

El  yo de la niñez

se me quedó en la acera

de mi calle de barro,

el yo de la infancia se fue:

en el pueblo quedóse

entre regatos,entre aires de encina.

(No volví a verlo.)

 

Asomó el yo estudiante:

joven, alegre,

idealista,

rebelde,

romántico,

enamorado,

filosófico, de oración.

(No volví a verlo.)

 

Entróse el yo

adulto,

el razonado,

el de la vida diaria,

el de los avatares,

el descreído,

el de las tejas abajo

-de sol a sol-,

existencialista, cordial,

agnóstico,

indiferente, ateo, laico,

anticatólico,

caliente,frío,

que dio paso a la edad añosa.

 

Tres yoes

-circunstancias distintas-

existentes en mí

en uno solo:

un solo YO "ab aeterno",

no circuntancial,

inmaterial, pensador,

de la Esencia Divina,

de la Substancia Humana,

moldeando la personalidad

de la Persona.

(Tres yoes y un solo YO verdadero.)

(Salvador)