Ben-.

Que te quieran más-.

Que empiece tarde el día;

que no se tropiecen las olas

las unas contra las otras,

que rujan asesinas,

las horas clandestinas.

Que se busquen los amantes

lejos de los círculos polares,

que se encuentren y se hallen

en permanente estado de vigilia.

Que los conductores de los autocares

padezcan de amnesia, que no recuerden

ni tu nombre ni el mío, grabados en los

asientos laterales.

Que no vuelva el pasado, y vuelen

palomas hacia tu nido; que tomen

tu regazo al asalto, la paz y la alegría.

Que no caiga la nieve en vano,

ni la lluvia ni el sol del verano,

que se estropeen los relojes sobre

la muñeca de tu mano.

Que te quieran más que te han querido

y se les nuble la vista, a los pájaros

de mal agüero.

 

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