El fuego es flama,
que se enciende y quema.
Es la llama,
que nos ayudará a querernos.
Es la brasa
que incendia y mi alma arrasa.
Es volcán,
que estalla y fluye.
Es tromba,
que me arrastra y vuelca,
en un mar de pasión.
Dejando mis sentidos
a la más sublime noción.
Así es el fuego del amor...
Y hoy arrimo mi ave friolenta,
Titubeante, a tu fuego.
Quizás en tus brazos encuentre calor.