Ayer el gobernante apareció con medidas concretas, agenda y su apertura al diálogo; hoy la gente continúa manifestándose y emergieron los políticos que se habían ocultado para iniciar en las pantallas de TV la palabrería estúpida, en vez de ir a hacer su pega al congreso.
Cuando los más violentos del pueblo, haga cenizas a uno o varios de los políticos, cómo en Italia, ¿se callarán ante los medios de comunicación en vivo como corresponde al momento? Pareciera que para ser político en este país hay que ser estúpido o sinvergüenza o mafioso, ... o una mezcla, altamente peligrosa para la población.
Los presidentes de los partidos de izquierda se restaron para conversar con el Presidente de la República sobre las medidas y agenda tendientes al termino de la crisis; sus razones: retirar las tropas de las calles, convocar a dirigentes sociales a dicha reunión, renuncia de ministros.
Cuando todos los políticos son los cuestionados, es un absurdo, pero es verdad que Dios enceguece a quienes quiere perder.
Los representantes de la Iglesia Católica, más sabios hasta ahora, no han hablado porque tendrían que saber que son parte del problema, por su pedofilia, su doble moral,...
Hasta algunos empresarios han estado dispuestos a subir los sueldos a un mínimo razonable, postergar el incremento de las tarifas de electricidad por 2 años,...
¡Que sea lo que Dios quiera!