¡Hoy, el cielo no es azul
ni está poblada de estrellas
solo hay nubes negras
queriendo llorar!!
¡Y la lluvia inclemente
cae en el campo santo
dónde quedará los restos
de mi amada, que tanto amé!
¡No, no te digo adiós
vida de mi vida
sino hasta pronto
alma de mi alma!
¡Llega la noche
y la luna tímida se oculta
entre las nubes
mientras la lluvia se mezcla
con mis lágrimas
de amargo quebranto
el dolor que siento al perderla
es tan intenso
que morirme con ella, quisiera!
¡La amé, con toda mi alma
la quise, más que a mi vida
para que seguir viviendo
si ya no estará conmigo!
¡Hoy, el cielo no es azul
ni está poblada de estrellas
solo hay nubes negras
queriendo llorar!
¡Hoy, mi corazón sangra
irremediablemente
profundo es mi dolor
sufre mi corazón
por la mujer
que tanto amé!
¡Espérame en el cielo
cariño mío
para seguir amándote
con toda mi alma
para estrecharte
en mis brazos
y no separarnos
nunca jamás!!!
Autor: Mauro J. Cassaño
mallíto
23/10/2019