Pensé cada palabra que escribo como nunca jamás lo había hecho. Y es que describir cualquier emoción es evocar una comparación de algún momento extasiado de la misma... ¿Cómo describes que estás feliz sin compararlo con alguna memoria?
Que se atreva el primero a describirme tristeza, sin evocar siquiera algún comparativo...
-Estoy triste porque siento soledad, la tristeza es sentir soledad...
Pero la tristeza también es angustia o el dolor de haber dejado caer un caramelo...
Y, lo que te ahoga el pecho cuando sientes dolor... A eso ¿Cómo le llamas? Y a lo que tu alma siente cuando besas con amor... A eso ¿Cómo le llamas?
Tengo tanto por decir y tanto que expresar que ni siquiera este verso puede tener coherencia entre sí, porque necesita ser enlazado con todo, tanto como la tristeza necesita ser asociada a un adjetivo o a un verbo.
Aún en el peor de mis momentos había deseado plasmar cada palabra, pero jamás le encontré sentido a escribir y escribir sin que nadie entienda.
¿Hay alguien aquí que me entienda?
Me dice la vida que sí... Te hablo a ti, a mi propio yo... Si no es a ti... ¿A quién iré?
Por más que intenté buscar en alguien palabras de comprensión total, no las hallé... El consuelo lo encontré en mi interior, la alegría la encontré en mi interior... Y así me la paso todo el tiempo, esperando entender porqué incluso, siendo yo quien siente, a veces, no puedo sentirme...
¿Lo sientes?
¿Me sientes?
¿Me entiendes?