Adán Aca

Morfeo.

Era una noche como cualquier otra o eso parecía, sin darme cuenta Morfeo me había hecho preso de su poder. A veces cuando piensas en medio de la noche, dormir es una forma de romper la catarsis con la noche.

Después me di cuenta que no fue un capricho de mi cuerpo o del señor del sueño, fue más una recompensa, ¿A qué? No lo sé con certeza, solo se que pude ser feliz, paseamos de la mano, comíamos en la orilla del mundo y bailamos bajo la tonada de la aurora boreal.

Nuestros cuerpos se dejaron llevar y recorrimos  el mar de placeres que hay en nuestros adentros, disfrutamos cubrir nuestra desnudez con caricias, mimos y de vez en vez una que otra brusquedad.

¡Oh Morfeo! finalmente sí fue una dulce tortura, me despiertas cuando disfrutaba bien de su compañía y me dejas con el letargo que el sueño me dejó...

Adán Aca.