No puedo dejar de pensar en tu hermosa mirada,
no puedo, ni siquiera olvidar de aquellos besos apasionados,
todavía no olvido que me has roto en mis pedazos,
aún así, sigo viéndote como lo más hermoso que existe.
A veces, suelo pensar en ti,
suelo recordar, el dolor pesado como trompeadas en el alma,
la pregunta aquí no es, ¿Que ví en aquella mujer?
sino es ¿Que vió aquella mujer en mí?
Debo aclarar que la culpa fue mía,
porque sabiendo que me ibas a lastimar, decidí arriesgarme.
Recuerdo aquellas primaveras a tu lado,
de tierra dulce, que había suspendido el alma,
trato de olvidarte, o que regreses conmigo,
totalmente declaro lo perdido que estoy.
Caminaba desolado, y siempre te veía,
siento que me vuelves a gustar, como aquella vez en que te miré,
pero no puedo hacer nada al respecto,
no puedo obligarte a sentir, lo que siento por ti.