Él se sumerge en el horizonte
enciende el calor, apaga el frío
¿se llenará la luna de brío,
para alumbrar lo oscuro del monte?
Acariciando su cabellera
el susurro inunda la quebrada
la brocha es matiz de madrugada
y el amor adorna la pradera.
Abrazados de tierna mañana
embebidos por el dulce idilio
dos corazones son el concilio
para perpetuar la raza humana.