Principio, fin, palabras son tan solo
¿Qué es el principio si no el primer final?
¿Qué es el final si no el principio eterno
de esa espiral en que el tiempo no ha lugar?
¡Pobre palabras! Luceros en la noche
en una noche sin luna ni alborada
pretendiendo alumbrar nuestro camino,
¡ciegos vagando en medio de la nada!
¡Pobres palabras! Fugaz polvo de estrellas
buscando un cielo donde poder brillar
un firmamento donde escribir sus rimas
la partitura para poder cantar.
Nos queda el tibio arrebol de la mirada
Las manos sabias que esculpen en la piel
el mudo abrazo que funde nuestras auras
Y nos abduce a un nuevo amanecer.
Siempre nos queda viajar al epicentro
profundizar en la piel de la verdad
borrar de un soplo el tiempo y el espacio,
buscar a dios y perseguir la paz