El tulipán negro de tu entrepierna
Fresco, carnoso, descarado
Obertura de una carne trémula
Géiser que erupciona
Hacia dentro
Siempre hacia dentro
De pie, observo.
La contemplación, de sentado
Con los ojos cerrados bien despiertos
El plexo solar abierto irradiando
Naranja oblicuo Naciendo
Inmenso azul Meditando
Abres sus pétalos
Y fragancia ha recién humedecido
En una sola inspiración
Mis pulmones escartxados hasta entonces desérticos
Llenos de nada
Vacíos de todo
Silencioso pubis eco del sexo
Sinfonía en dos movimientos
A continuación, el coro de sonidos primigenios
Gemidos resuellos jadeos
Eurídysses agudos staccatos
Orpheus el do de petxo
Vulva frugal
Sabrosa
Delicioso néctar libado
Almíbar Lisonjero
Extracto de un rapsoda exiliado en su propio auxilio
Mariposa del instante soy
Ángel sólo en tus sueños
Hazme el amor hoy
Sea quien fuere