YO ERA EL AMOR DE UN POETA...
Él era el amor de mi vida...
Ayer él era mío y yo era suya
...amanecía siempre a mi lado, tan juntos
y me besaba de los pies a la cabeza,
me despertaba pasiones y lo hacía mío,
los poros de mi piel se abrían con su poesía,
me sentía arder en llamas estando en sus brazos
era como ascuas de fuego su mirada
y tanto lo deseaba qué mis pechos se excitaban
yo repetía su nombre una y otra vez y otra vez,
besaba mis lunares y yo me estremecía,
su boca y mi boca se buscaban rimaban con sus versos,
me decía amada mía y me sujetaba a su pecho
¡Me hacía tan feliz amarlo, era tan mío!
él era mi pasión, enloquecía con sus besos
y verme en sus ojos era mi obsesión,
admiraba su gallardía y su hombría
era un hombre fuerte, atractivo y educado,
era inspiración de todos mis poemas de amor,
me hacía sentir plena, su voz era sensual,
me hacía suya con sólo oír su voz, me provocaba
y me enloquecía, era mi fascinación y mi fantasía,
era mi gusto poseerlo hacerlo mío y yo ser suya
sentirme en la gloria de sus deseos y complacerlo,
me llenó tantas veces que sigo llena de su gallardía,
difícil poder olvidarlo, era el amante perfecto,
me perdía en su piel y me quedaba allí perdida en él.
Cuando estaba con él no sentía el tiempo pasar
poco me importaba la hora, el minuto o el día,
nos gustaba el oler del orgasmo y nos bebíamos
de boca a boca y, corría el sudor entre las piernas
y bajo su piel era su mujer y el mi hombre prefecto,
me llenaba de besos de los pies a la cabeza,
mis senos conocían el sabor de sus labios,
sus labios vestían todo mi cuerpo de besos,
Siempre me tenía para él y yo lo tenía para mí,
me despertaba pasiones y me provocaba a amarlo
y a tenerlo y a saberlo todo mío y para mí.
Me dejó soñando sueños y ahora sigo soñando.
...A veces todavía sueño con él sus sueños y mis sueños
¡Él era el amor de mi vida, mi todo y mi siempre!
Fue el hombre del qué me enamoré d.e.p.
Era tan mío y yo tan suya que no existía mañana sin él.
¡Era el amor de mi vida, era mi poeta!
Alicia Pérez Hernández… México
No es la pluma la que escribe, es el alma
Todos los derechos reservados©