No hay ni una sola luz en esta total obscuridad.
La esperanza murió, y su cadáver me atormenta.
En esta inmensa profundidad estoy, porque no puedo salir.
Ante mi inminente muerte, no tengo a dónde ir.
Hice de mi vida un desastre que nunca quise reparar.
No existe otro lugar mejor donde deba estar.
Si aquí tengo que pagar mis deudas, aquí lo haré.
Si es este infierno la consecuencia, la acepto.
Recordar los buenos tiempos no tiene ningún efecto.
Solo la eterna garantía de un desfile de mí, defecto por defecto.
Palabras flotantes, que caen del cielo para herirme.
¿Cuándo tendrá la vida piedad de mi? ¡Ya quiero morirme!
Todo tiene un final, espero que hoy lo sea.