Tu mirada me asalta el alma,
me hipnotiza.
Esa mirada llena de secretos,
palabras no dichas.
En esa mirada de café y caramelo,
me pierdo al instante,
me desubica, me enmudece,
me enloquese, me atrapa.
Tu mirada me enamora.
Pero sé, que tú;
no me miras igual.