A mi hermana (La del medio)
Con su serio semblante avanza,
ahí está ella, la del medio, mi hermana.
Siempre atenta y predispuesta,
tal bravía escorpiana.
Tenaz como pocos, mi bella Vicky está pendiente
de toda su familia, a la que sus puertas siempre abre.
Constantemente tajanate, nunca jamás ausente,
esa es mi hermana, ahora convertida en madre.
Acapara una porción de mi niñez,
pues de manchas y escondidas fuimos confidentes.
Y ahora, en la obligada adultez,
seguimos de la mano, fieles y sonrientes.
Que tu día se plasme de belleza y sonrisas.
Dejate amar por la vida que hoy quiere saludarte,
invitala a tu fiesta, que está ansiosa por formar parte.
Después de todo, es ella quien siempre te acaricia.
No desistas jamás, dalo todo.
Tente paciencia y aún más confianza.
Y camina tranquila, aunque deba ser por el lodo.
A tu lado yo estaré, con mi corazón que en tí se afianza.