Rosita de Mendoza

Nada entiendo

En un mundo partido en dos

donde la derecha condena a la izquierda

y la izquierda culpa a la derecha

que el peso  no alcanza

que el hambre no se calma

que la sed  no se sacia

 

Que sólo los ricos te darán riqueza

cuando sus barrigas se llenen

estallen y derramen

Y que los pobres sólo producen pobreza

Si quieres riqueza vota a los ricos

Si quieres pobreza vota a la izquierda

Que ni izquierda, ni derecha

Que centro izquierda

Que centro derecha

Que populistas y libertarios

Que un libre a costa de cinco mil esclavos

Que los indios, que los vagos

Que los negros, que los blancos

Que los de arriba y los de abajo

 

Nada entiendo

Sólo sueño con una casita blanca

(y no la puedo pagar)

Con niños riendo camino a la escuela

(y veo pequeños zombis jugando con jeringas)

Que el pan se consigue con el sudor de mi frente

De mi frente, no de la tuya

(y perdí mi empleo porque no es rentable tu empresa)

Un día de descanso, una fiesta

Una charla de café

Un libro, una canción, un gol de media cancha

Son sueños imposibles

 

Nada entiendo

De qué se ríe el buda

Por quién reza el Papa

Por qué Sion fabrica armas

Y los musulmanes se vuelven bombas

Y Lula Libre

Y Santiago grita

Y Evo llora

Y América sangra y sangra

Y las heridas no se curan

 

Y entonces…

miro tus ojos tiernos

y acaricio tus rizos dorados

y juego tus juegos bélicos

y suena tu risa mientras derribas mi castillo de arena

Y me pides que haga otro

Y sigues jugando

Y no quiero que crezcas

Porque tengo miedo

Porque nada entiendo

 

Mis manos siempre vacías

Y mis pies  cansados

de tanto pisar arena

Y mi cuerpo quebrado

de tanto andar agachado

 

 

 

 

 

 

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