emiliodom

INQUIETUD

    Somos muchos más que más, los que intentamos no sentir vacío en el alma. Unos ojos expresivos, una cálida boca, y un encanto personal, ofrecen color a la vida. Hoy al abrir la ventana de la habitación, se ha llenado de una luz especial, como si se tratara de una invitación. He salido a la calle, con el mismo gozo de un niño al cual le han regalado su juguete preferido, desnudo de palabras, pero con la intención de encontrarte en el resplandor de lo divino. Hechizado me encontré, al llegar la noche rodeado de sombras sin nombre... ¡No está en mi deseo el naufragar en el mar de las tinieblas!!. Quisiera verme enredado en la luz dorada de tu risa, y regresar al sabor clementino de tu anhelada presencia...