Al amor perdido
Aún recuerdo, criatura
la gracia formal de tu cintura
que como leve brisa dibujase
en el aire virtual hermosa frase
diciendo de tu esplendida figura
regalo de mis ojos, en tantos años
que no cambiaron nada tu hermosura
cuando de pronto te quebró la muerte
que trocó mi existencia feliz
en vida oscura
y al contemplar tu blanca sepultura
que humedecen mis ojos de amargura
espero, con infantil ansía,
de reunirme contigo donde estés,
alguna vez,
cuando me llegue el día.
José Miguel Fernández