Rodrigo A. Alvarenga

Celda por las mañanas

Gana, deseo y apetito.

Tus labios

son pecado y delito.

(Un) Sueño que me mantiene vivo/

Vívido recuerdo asesino.

Por tu sonrisa fui convicto.

Mas nunca hubo cometido…

 

Soy víctima de un mal juicio.

 

Condenado a vivir entre delirios,

ideando mil y un vidas contigo,

sin siquiera ser tu tipo…  

 

(Jodido) Sonrío.

Pues,

esta noche,

formaré un castillo;

compondré unos diálogos,

dirigiré unas caricias,

te veré a los ojos…,

disfrutaré la película.

 

“Andrea, sos divina”

Seguidamente,

te daré un beso en la mejilla,

sonará la alarma,

y…