When in the soul, what was most given was given, wishing for what is most given, when in the soul one feels what is most desired. And he came, and with him, the desire for envy. And it was seen coming when the soul is exalted, what is most given, when the soul is given, what is most felt and perceived. When in the soul you feel what was most given, when in the soul it is fantasy, as an exact virtue and an essence that is almost as gifted as the same feeling of envy itself. When he wanted to be for himself, it is like a single abyss, destroying what turns around the most, when in the desert he gave what is most like doubt. When in the environment it is given as the key to open a single heart. When what was most broken, a way of seeing and believing, what is most felt, when you feel the way to believe and see in heaven the cruel envy. When in the soul there was what is most known to understand, that envy is like the brave boldness. In wanting to win what was most given, when the soul arrives as it ends what it is to be able to feel envy in the heart and with all virtue. When he gave himself what he feels most here, when in his soul he gave himself in all ungrateful jealousy, and of being able to envy without reason with every way of giving yourself the restrained attraction, of still believing in reason. When in the breath you get what the cold gave, when in the rancor you debate what you want to be. When the cold was given what most poison was delivered when he felt the cold as heat in the eyes of envy. When in the soul he boasted a precious gesture in the soul, undermining the sinister and warm the desire for envy. When in the soul it is supplied with tragedy and vile desires. When inside you feel what was given, a vile and terrible perception. When in the soul it warms up like a boiling water, when it was given what is most perceived. When he arrived, he did arrive, when at the hotel, \"The Guest in Your Skin,\" came the daring envy. When envy is loved more, of wanting to love what is most desired. When in the calm one takes a terrible wait to wait for the same time in the only envy. When in the light of the soul it shone like never before, when he arrived, yes. When in the desert it intensifies more and more with the way of seeing the silence when he arrived, yes. When in the soul it is identified as the most terrible calm, as the most ascending as such condescending fire on the road. As a dismal outcome that dares to challenge what is adjacently concerned, like a peace, or a way of finding calm or waiting to wait for a volume inside the first breath so cold it gave him when he arrived. When the soul is discovering what I agree with, a terrible light has formed. When it gets dark on the road because the way to find peace within one\'s heart provides the way to see the same sky. When it is necessary to tie what encrudes when in the soul it gives light and peace. And he arrived, yes, yes, yes, it was like warning the way of acting not to pretend more and more. When in paradise it is filled with an unreal fantasy, but, this time it was more real than the sky itself. When in the soul came the light as the flame or as the devouring fire, which within the passage to live without certain science must have believed in the most sublime. When in the soul it was due to give an impetuous, devastated and unreal breath. When the soul is filled with raw sensations that delight here. When in the soul the thing that is decided more in the light is filled with laughter and yes, also of tears. When what is believed in the cruel path is perceived in the soul, avenging what it should never have been believed: total envy. When in the soul it feels like the same force in looking for what happens.
To be continued…………………………….
El Deseo de la Envidia
Cuando en el alma, se dió lo que más se dió, deseando lo que más se da, cuando en el alma se siente lo que más se anhela. Y llegó él, y con él, el deseo de la envidia. Y se vió venir cuando en el alma se enaltece, lo que más se da, cuando en el alma se da, lo que más se siente y se percibe. Cuando en el alma se siente lo que más se dió, cuando en el alma es fantasía, como una exacta virtud y una esencia que casi se es tan dotada como el mismo sentimiento de la propia envidia. Cuando quiso ser por él mismo, es como un sólo abismo, destruyendo lo que más da vuelta, cuando en el desierto se dió lo que más es como la duda. Cuando en el ambiente se da como la llave por abrir un sólo corazón. Cuando se desbarata lo que más se dió, una manera de ver y de creer, lo que más se siente, cuando se siente la manera de creer y de ver en el cielo a la cruel envidia. Cuando en el alma se dió lo que más se sabe de entender, que la envidia es como la valiente osadía. En querer ganar lo que más se dió, cuando en el alma llega como termina lo que es poder sentir la envidia en el corazón y con toda virtud. Cuando se dió lo que más se siente aquí, cuando en el alma se dió con toda ingratos celos, y de poder envidiar sin razón con toda manera de entregarte la comedida atracción, de creer todavía en la razón. Cuando en el hálito se obtiene lo que el frío dió, cuando en el rencor se debate lo que quiere ser. Cuando en el frío se dió lo que más veneno se entregó cuando sintió el frío como calor en los ojos de la envidia. Cuando en el alma se jactó de precioso ademán en el alma, socavando muy adentro el siniestro y cálido el deseo de la envidia. Cuando en el alma se abastece de tragedia y de vil deseos. Cuando en el interior se siente lo que se dió, una vil y terrible percepción. Cuando en el alma se calienta como un agua hirviendo, cuando se dió lo que más se percibe. Cuando él llegó, sí llegó él, cuando en el hotel, “El Huésped en tu Piel”, llegó la osada envidia. Cuando se ama más la envidia, de querer amar lo que más se desea. Cuando en la calma se lleva una terrible espera de esperar por el mismo tiempo en la sola envidia. Cuando en la luz del alma brilló como nunca, cuando él llegó, sí. Cuando en el desierto se intensifica más y más con la manera de ver el silencio cuando él llegó, sí. Cuando en el alma se identifica como la más terrible calma, como el más ascendente como tan condescendiente fuego en el camino. Como un funesto desenlace que se atreve a desafiar lo que se concierne adyacentemente, como una paz, o una forma de hallar la calma o la espera de esperar un volumen dentro del primer hálito tan frío que le dió cuando él llegó. Cuando en el alma, se está descubriendo lo que con deacuerdo, se ha formado una terrible luz. Cuando en el camino se oscurece porque mediante la forma de hallar la paz dentro del propio corazón se abastece la manera de ver el mismo cielo. Cuando se debe de amarrar lo que encrudece cuando en el alma da luz y paz. Y llegó él, sí, sí, sí, fue como advertir a la manera de actuar que no fingiera más y más. Cuando en el paraíso se llena de una irreal fantasía, pero, esa vez era más real que el propio cielo. Cuando en el alma llegó la luz como la llama o como el fuego devorador, que dentro del pasaje a vivir sin ciencia cierta se debió de creer en lo más sublime. Cuando en el alma se debió de dar un hálito impetuoso, devastado e irreal. Cuando se llena el alma de crudas sensaciones que se deleitan aquí. Cuando en el alma se enfrasca lo que más se decide en la luz llena de risas y sí, también de llanto. Cuando en el alma se percibe lo que se cree en el camino cruel, vengando lo que nunca se debió de creer: la total envidia. Cuando en el alma se siente como la misma fuerza en buscar lo que acontece.
Continuará………………………………..