Ya sé que no puedo cambiar el mundo. Pero soñar no cuesta dinero. Si fuera mago lo haría en un segundo. Y después pasearía tan retrechero. Ciudades antiguas como Sevilla. Que no pierdan su sabor. Que es una vieja maravilla. Donde está presente el amor. Salamanca templo de sabiduría. Abierta a todos los aires. Allí no hay sitio para la jauría. Y son libres todos los donaires. Toledo abrazada por el Tajo. En tus calles convivieron religiones. No hay sitio para el marrajo. Y si hay lugar para las emociones