Pasan los años, la vida
Se va yendo por las manos;
No podemos evitarlo,
Es letal nuestra agonía;
Nuestra esperanza bendita
Sólo es un sueño vago;
La huellas de nuestros pasos
Se borran por la fatiga;
Y al volver nuestra mirada
Hacia el lejano horizonte
Contemplamos un mar de almas
Como nubes ante soles
Que se convierten en nada,
Ya sin fuerza y sin amores…