Sentires que jamás he palpado;
vivir atrapado en un gran limbo
donde no se si ser cruel o seguir fiel,
si entregarme al amar o solo al placer,
si hacerle caso a la mente y no al corazón,
o amar sin que importe la razón.
Confusión atenuante del cual soy preso,
recordar que siempre fui sincero
y que nunca he sido un aventurero,
saber que jugar con el amor duele
y sentir que nadie se lo merece;
reniega al corazón que vuelva a creer
y peor aún volver a sentir algún querer.
Ausentarme del mundo que he creado
donde soy feliz y no hubo llanto,
donde lo deseado lo inventaba
y jamás la realidad me dañaba,
a hecho que olvide todo lo que soñaba
y que vea a la realidad toda destapada.
Pero entre tantas mentiras y dolor
parece aun florecer una sola flor
que aun aroma guarda en su interior
Ironía; aun el frío embarga todo mi ser
y ha opacado de mi pecho el respirar;
un amor del pasado que ha de retornar
talvez para brindarme lo ansiado
o dejarme nuevamente sollozado.
Darse cuenta que cuando se tiene
la vida nos otorga aun más,
pero cuando realmente se necesita
ella misma de nuestras manos nos ha de arrebatar.