BESANDO TU PIEL
Puedo lograr tener
imaginación.
Pensé la había perdido
para siempre.
Pero con el tiempo
todo, o casi todo,
puede recuperarse.
También la imaginación.
Beso toda tu piel.
Hoy, todo tu cuerpo
me pertenece.
Te beso, desde
la frente
hasta tus pies.
Es una manera
de ser feliz.
Aunque la realidad
no exista.
También tú imaginas.
¡Quién no!
Pero seguro estoy
que no imaginas
lo que yo.
Porque no me conoces.
Tampoco yo.
Solamente te imagino.
Imaginar a veces,
lo imposible,
lo que no existe,
alimenta el alma.
Hoy alimento la mía.
Te beso, amada,
sin tenerte,
sin conocerte.
Mi imaginación
me lleva a sentir
tu piel,
rozando la mía.
¡Qué bello es imaginarte!
¡Qué maravilloso
es imaginar
un amor, sin poseerlo!
Con ella,
sigo besando tu piel,
desde la frente,
hasta tus pies...
Derechos reservados de autor( Hugo Emilio Ocanto - 12/03/2015)