Julio Noel

¡Ah ciudad encantada, bella perla del mar!

¡Ah ciudad encantada, bella perla del mar!

Tú que entre las ciudades la más hermosa eres,

dime, ¿entre todos los más afortunados seres

adónde a mi celeste amada iré yo a buscar?

 

¿Adó mis inciertos pasos habré de orientar

para encontrar a la hechicera y sublime Ceres,

hermosura sin par entre todas las mujeres,

y que nadie en este mundo pudo superar?

 

Dechado de beldad, tesoro etéreo y divino,

por contemplar de nuevo tu inefable hermosura

no dudaría en hollar el execrable averno.

 

Muestra a tu impávido esclavo el sidéreo camino

que ponga fin a tanta congoja y amargura,

porque vivir sin ti es vivir en el infierno.

 

Suspiros y sueños de amor