Un barco de papel es como el sueño,
del hombre, que alcanzar el sol quisiera,
bogando por los mares, do pudiera
sentirse del amor gallardo dueño.
El siente que su mundo es muy pequeño
sin fuego de pasión, que arder hiciera
la flama, que sus horas convirtiera
en bello paraíso del ensueño.
Mirando que su anhelo luminoso
se pierde en la corriente del olvido,
navega con semblante doloroso
tratando de encontrar farol prendido;
en medio de horizonte borrascoso
que todo su vigor ha consumido.
Autor: Aníbal Rodríguez.